Descubre cómo conocerte a ti misma y desarrollar la fuerza de voluntad puede ayudarte a ser más organizada
¿Alguna vez te has sentido abrumada por la cantidad de cosas que tienes que hacer o por el desorden que hay en tu hogar/ espacio de trabajo? A veces, puede parecer imposible saber por dónde comenzar a ordenar nuestra vida, nuestras cosas y que esto nos ayude a no colapsar de estrés. Te cuento que una vida más organizada sí es posible. Te aseguro que sí puedes tener una vida más plena trabajando en dos habilidades vitales: la fuerza de voluntad y el autoconocimiento.
La fuerza de voluntad y el autoconocimiento, son dos habilidades fundamentales que nos permiten desarrollarnos de manera más plena y alcanzar nuestros objetivos en la vida.
¿Qué es tener fuerza de voluntad?
La fuerza de voluntad, es la habilidad de resistir la gratificación instantánea y el impulso de hacer algo que no es beneficioso para nosotros a largo plazo, y en cambio, optar por acciones y decisiones que estén en línea con nuestros objetivos y valores. La fuerza de voluntad es una habilidad que se puede desarrollar y fortalecer a través de la práctica y la disciplina. Cuando se trata de ordenar y organizar tu vida, la fuerza de voluntad te ayuda a resistir la tentación de posponer las tareas que necesitas hacer para tener un espacio más ordenado y pleno.
¿Qué es el autoconocimiento y cómo nos ayuda a ser más organizados?
El autoconocimiento, es otra habilidad esencial para desempeñarnos como adultos funcionales, que nos permite comprender nuestras propias fortalezas y debilidades, así como nuestras necesidades emocionales y psicológicas. Al conocer tus motivaciones y deseos, puedes tomar decisiones más informadas y conscientes que te ayuden a alcanzar tus objetivos de manera más efectiva.
Cuando se trata de ordenar y organizar tu vida, el autoconocimiento te ayuda a identificar qué es lo que realmente te importa y te motiva a crear un espacio que refleje tu personalidad y estilo de vida. El autoconocimiento también nos permite identificar y superar nuestros propios sesgos y prejuicios, lo que nos permite tomar decisiones más objetivas y equilibradas.
¿Cómo se relacionan el autoconomiento y la fuerza de voluntad con ser más organizados?
Están estrechamente relacionados. Al conocer nuestras propias fortalezas y debilidades, podrás identificar las áreas en las que necesitas mejorar o fortalecerte, como por ejemplo, si necesitamos mejorar nuestra fuerza de voluntad y establecer objetivos realistas y alcanzables. La fuerza de voluntad, a su vez, nos permite desarrollar la disciplina y la autodeterminación necesarias para lograr objetivos, como es el caso de ser más organizados(as) en cada aspecto de nuestra vida, empezando por el hogar.
Aunque la motivación es importante, por sí sola no es suficiente para lograr nuestros objetivos. Es necesario tener una fuerza de voluntad sólida que nos impulse a tomar la decisión de cambiar nuestra forma de vivir y crear espacios más limpios y ordenados que nos proporcionen tranquilidad y bienestar. Pero tomar la decisión no es suficiente, debemos poner en marcha las acciones necesarias para lograr nuestros objetivos. La disciplina y la constancia son fundamentales para establecer rutinas saludables y crear buenos hábitos que nos permitan vivir una vida más plena.
«La motivación sin acción no nos lleva a ninguna parte»
Es importante que sepas que la fuerza de voluntad es un recurso limitado. Se agota a lo largo del día y, por lo tanto, es más fácil resistir la tentación y tomar decisiones difíciles cuando estamos frescos y renovados. ¿Qué implica esto? Que es mejor aprender a conocernos primero para poder planificar decisiones difíciles para el momento del día en que tenemos más energía, y evitar tentaciones innecesarias cuando nuestra fuerza de voluntad es baja.
Consejos para tener una vida más organizada, trabajando el autoconocimiento y la fuerza de voluntad
- Empieza poco a poco: No trates de ordenar todo de una sola vez, ya que esto puede ser abrumador y desalentador. En su lugar, empieza por una tarea a la vez. Por ejemplo, puedes empezar por organizar tu escritorio antes de abordar todo el espacio de trabajo.
- Haz una lista de tareas: Una lista de tareas te ayudará a mantenerte enfocado en lo que necesitas hacer. Prioriza las tareas más importantes y trabaja en ellas primero.
- Sé consistente: La consistencia es clave cuando se trata de mantener un espacio organizado. Trata de establecer una rutina diaria o semanal para mantener tu espacio ordenado.
- Deshazte de lo innecesario: A menudo, tenemos cosas en nuestro hogar o en nuestro espacio de trabajo que ya no necesitamos o que están ocupando espacio. Deshazte de lo que no necesites y dona o vende lo que puedas.
- Celebra tus logros: No subestimes la importancia de celebrar tus logros. Cuando alcances tus objetivos, tómate un momento para reconocer tu esfuerzo y progreso.
Recuerda, mantener una vida organizada requiere de práctica y disciplina, es cómo desarrollar un músculo en el gimnasio pero los beneficios valen la pena.
¡No te detengas! Toma la decisión de empezar hoy mismo y verás cómo poco a poco, tu vida se transformará en una más organizada y satisfactoria.
Gracias por leerme;
Soy Kyra, creadora de Inplace y quiero ayudarte a vivir una vida más consciente a través del orden en tus espacios y en tu vida.